Ahí va la selección de progresivo de septiembre de nuestro experto Eloy Pérez, uno de los autores del artículo de portada del mes de octubre, dedicado a David Gilmour.
Anubis
The Unforgivable (Bird’s Robe)
Presentado como una única pista dividida en diez partes, el nuevo álbum del sexteto australiano es evidentemente conceptual (narrando la caída de un chaval en una secta religiosa y su posterior huida de la misma) y esgrime su habitual neo prog raso y al pie, concretado en cuarenta y cinco minutos sin sorpresas, más allá de mantener la calidad habitual.
King Crimson
Sheltering Skies – Live in Fréjus, August 27th 1982 (Panegyric/DGM)
Otra joya en directo para añadir al catálogo carmesí, con la formación de la época (Robert Fripp, Adrian Belew, Tony Levin y Bill Bruford) más que en plena forma. Grabado inicialmente para un lanzamiento en video, el audio del concierto nunca se publicó de forma independiente. Hasta ahora, claro. Un artefacto de adquisición obligada, disponible en CD o doble vinilo.
Jordan Rudess
Permission to Fly (InsideOut)
Nunca ha perdido el tiempo el amigo Jordan, cuando Dream Theater se toman un respiro. Incansable y prolífico, entrega ahora este Permission to Fly, navegando de nuevo entre el rock progresivo, el heavy metal y el jazz menos ortodoxo. Un primera espada de sobras conocido, siempre fiable, en esta ocasión ayudado por la voz de That Joe Payne, adecuadísima.
Red Sand
Pain’t Box (Independent Music Market / SPBN Music)
Undécimo álbum de los canadienses y su mejor disco en mucho tiempo. Una vuelta a las raíces de la banda, a ese sonido neo progresivo deudor de Marillion e IQ, pero con los Floyd siempre en la guantera. Cinco temas “cortos”, entre los cuatro y los cinco minutos, que desembocan en «Tie», una suite de media hora en la que concentran todo su talento.
Nick Magnus
A Strange Inheritance (Magick Nuns)
Renombradísimo músico de sesión, teclista en The Enid, Autumn y la banda de Hackett en los ochenta, Magnus presenta su séptimo trabajo en solitario, una historia de época con invitados de postín. El resultado no sorprenderá a quienes ya lo conozcan, o busquen aquello en lo que siempre ha destacado: un prog rock de raíz sinfónica, tan clásico como épico.
The Foxholes
Flora i Fauna (Autoeditado)
La música de estos catalanes siempre ha parecido buscar un extraño equilibro entre lo lúcido y lo lunático; entre lo directo y lo disperso. Flora i Fauna recupera voces tras su anterior -y completamente instrumental- Hex (2021) y muestra la cara más compacta y hasta cierto punto agresiva del trío. Hard prog envuelto con su siempre presente aliento experimental.
Pure Reason Revolution
Coming Up To Consciousness (InsideOut)
Tercer álbum después de su reunificación tras una década desaparecidos, y confirmación de que siguen sabiendo mezclar lo progresivo con lo alternativo de modo bastante eficaz. No les sobra personalidad, también es cierto, pero lo suplen con una estupenda pericia compositiva y una vocación melódica que se detiene siempre justo antes del abismo.
Infringement
Black Science & White Lies (Crime)
Una compleja narrativa que explora temas de fe, identidad y redención. Así definen los de Oslo su nueva propuesta a nivel lírico, un disco que sigue aupándolos como una de las bandas más interesantes e innovadoras del norte de Europa. Todavía les queda trecho antes de dar el salto a la primera división escandinava, pero sin duda están en el camino para lograrlo.
Eloy Pérez
